LOS JUEGOS MENTALES DE LOS NARCISISTAS: "Take away" - ¡Tomar e irse!

Los narcisistas son extremadamente habilidosos en el arte de la manipulación, especialmente de aquellos que les son más cercanos: pareja, amigos, familiares, compañeros de trabajo, etc. Manipulan, sobre todo, a través de una serie de juegos y tácticas psicológicas que han desarrollado con la práctica y que buscan, además de controlar a sus víctimas, generar algún tipo de reacción emocional, el "suministro" narcisista  o combustible, que tanto necesitan.

Los narcisistas continuamente están practicando algún tipo de juego con los demás. Pasan de una táctica de manipulación a otra sin avisar. Las 24 horas del día y los 7 días a la semana. No saben relacionarse de otra manera.  

Se necesita conocer estos juegos del narcisista, saber identificarlos cuando los estén usando, y aprender a no caer en sus trampas. La única manera de ganarle es, sencillamente, retirarse de la partida y no jugar con él.

El origen de estos juegos y tácticas manipuladoras está en la infancia. La mayoría de los narcisistas fueron niños acosadores encubiertos, los típicos de "tirar la piedra y esconder la mano", así fueron aprendiendo estrategias para controlar a otros, y las siguieron usando en su vida adulta, una práctica que con el tiempo se fue volviendo más fuerte y adictiva.

Uno de los juegos que continuamente practican los narcisistas, es el llamado "Take Away", en español: ¡Tomar e irse!

"Take Away": ¡Ahora te lo quito, ahora te lo doy!

El juego de "Take Away" - ¡Tomar e irse! tiene un esquema básicamente infantil: El niño acosador ve a otro niño feliz con un juguete, que él desea pero no tiene. Decide entonces, en un momento de descuido, escondérselo. El otro niño, al no encontrarlo, llora y se enfada. El futuro narcisista observa la situación, y disfruta con los resultados obtenidos. Al rato le dice al niño que a cambio de algo que él desea, un caramelo por ejemplo, le dirá donde está lo que busca. El niño accede y el acosador le devuelve su juguete. 

Básicamente, el juego consiste en mantener apartado, retenido, algo que la otra persona quiere o busca. Por supuesto, ya no se trata de juguetes, sino de todo aquello que los adultos esperan razonablemente de una relación: atención, cuidado, sexo, emociones, compañía, comunicación, etc.

Es una forma muy efectiva de controlar a alguien, porque choca con la lógica adulta. Por eso es tan difícil de entender ¿Qué sentido tiene que una persona que dice amarte de repente deje de prestarte atención, o se muestre indiferente a tus necesidades? La víctima se engaña cuando intenta aplicar sus razonamientos. En realidad, se trata de un juego infantil disfrazado, que el narcisista ha maquinado para controlarla y manipularla emocionalmente. 

La víctima de este juego queda indefensa, no sabe en realidad lo que está ocurriendo. Un caso extremo es el Tratamiento silencioso, de buenas a primeras el narcisista deja de comunicarse con su pareja, y se muestra distante y hostil. La necesidad humana básica de interacción con el otro queda retenida, sin ningún tipo de explicación. 

Siempre que practican este juego, buscan amarrar la atención de su víctima. Quien ha caído en esta trampa queda a la espera, en un estado de confusión y de ansiedad. Los narcisistas son expertos en dejar a las personas en suspenso, aguardando una respuesta suya, esta situación les hace sentir en control y les empodera sobremanera. 

Por ejemplo, se le envía un Whatsapp al narcisista sobre un asunto de su interés, y en mitad de la conversación deja de responder, la persona se queda colgada, en ascuas, a la espera. El abusador vuelve a conectarse al día siguiente, como si no hubiera pasado nada.

¿En qué cabeza cabe que alguien actúe de esa manera? En un adulto normal, por supuesto que no, pero en un narcisista, veterano niño acosador, es perfectamente plausible. 

Si la víctima le reclama su desconsideración, lo negará todo, la acusará de sobrerreaccionar, y le dará como excusa, por ejemplo, que el móvil se quedó sin batería. Esto puede confundir a la víctima o hacerle dudar. Sin embargo, días más tarde, observa que su patrón de conducta vuelve a repetirse, de nuevo hay otra situación en que el narcisista retiene su tiempo y su atención, la víctima, si está atenta, comienza a atar cabos, y a sospechar el juego manipulador del abusador. 

Con frecuencia, los narcisistas usan este juego como una forma de castigo por algo que les ha enfadado, y que nunca le dicen directamente a la víctima. Ella no tiene la menor idea de lo que ocurre, y no sabe como salir de la situación, dado que todo está disfrazado. 

Así actúan todo el tiempo los narcisistas,  le dicen a la víctima que la quieren, y al mismo tiempo, le retiran, con sus acciones, el afecto.

En realidad, ellos no están preocupados por lo que piensa la persona que sufre el abuso, las vueltas que le da en su cabeza para comprender su comportamiento errático. Ellos lo que sí buscan es su reacción emocional, que se enfade, y que lo manifieste, que se muestre nerviosa, confundida, rota, esa es su meta.

El narcisista gana la partida si logra, precisamente, que la víctima sienta dolor, ansiedad, desvaloración, confusión, soledad. Cuando ella le muestra esta reacción a su depredador, él se dice con satisfacción: ¡Eureka! ¡Funcionó! 

Para ellos es un placer ver tu reacción por algo que ellos han hecho para manipularte. Es como darle el "caramelo" al niño acosador, para que te devuelva el juguete. 

Cuando por fin obtienen lo que buscan, inmediatamente el narcisista le regala a la víctima algún cumplido, se muestra cariñoso tal vez, agradecido, amable. Y a renglón seguido se vuelve de nuevo para atrás y se va. Es el juego "Pull and Push", te empujo y luego me retiro, de esa forma la mantienen atrapada en su burbuja. 

Ciertamente, es perverso y peligroso que un ser humano sienta satisfacción en dañar emocionalmente a otros, y diseñe toda una estrategia psicológica para conseguirlo. Ese es el día a día de una relación con un narcisista, por eso es tan destructivo.

La clave de todo esto es no jugar, simplemente. Sobre todo, no hay que regalarle al narcisista ninguna reacción. Nada de nada.  

Gracias, de antemano, por sus aportes y comentarios.

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