Los mitos del amor romántico y la manipulación narcisista


Los narcisistas, para seducir y manipular a sus víctimas, se valen de una serie de creencias acerca del amor romántico y el enamoramiento, que idealizan excesivamente las relaciones de pareja y tienden a nublar el pensamiento crítico de las personas que caen en sus redes. 

Estos mitos están por todas partes, en las canciones que se ponen de moda, en las películas, en las series de TV, etc. En realidad, constituyen una trampa, con frecuencia se convierten en justificativos, en nombre del "amor", del abuso y del estado de indefensión de las víctimas. 

Los narcisistas los utilizan profusamente, especialmente durante la fase del love bombing y cada vez que quieren reenganchar a sus presas. 


Excusar una relación con una persona tóxica o maltratadora, con la tesis de que el "amor es ciego" es una trampa. El narcisista estará encantado con la idea, pero se trata de un justificativo del amor tóxico. El verdadero amor tiene los ojos bien abiertos, "cerrarlos" es una ingenuidad y un peligro. 


Muchas víctimas, al principio de su relación con el narcisista, sienten una conexión "especial" con el abusador, creen haber encontrado su alma gemela. Se trata de un espejismo, el abusador ha copiado sus rasgos, así manipula su percepción. El efecto es tan poderoso que cuando el narcisista le muestre su verdadero rostro abusivo, la persona se aferrará una y otra vez a aquella imagen primera de la cual se enamoró. Ese personaje no existe, se trata de una simulación. El narcisista es un ser camaleónico, se apropia de la personalidad de su víctima para seducirla, y luego la devalúa y descarta. 

Por cierto, la existencia de las "almas-gemelas" no tiene ningún fundamento, lo que sí existe son compatibilidades de carácter, valores, creencias, etc. 


Las personas empáticas suelen ser fieles creyentes en el amor. El depredador, que es experto en simular el amor pero que no lo experimenta, se aprovecha de esta creencia de su víctima para manipularla, para jugar con sus expectativas. Lo cierto es que por mas actos de generosidad que haga la víctima, todo es inútil, él seguirá siendo la misma persona abusiva y manipuladora. Porque el amor no lo puede todo, no puede saltarse nunca la libertad del objeto amado, pues cada ser humano responde de sí mismo. Reconozcamos que aunque el amor es una fuerza extraordinaria, no lo puede todo, y es sano aceptar esta realidad y sus consecuencias.


Muchas de las situaciones de abuso giran en torno al problema de los celos. En el caso del narcisista, debemos considerar dos aspectos. Por una parte, dada su inseguridad, el abusador suele mostrarse altamente controlador de la vida de su pareja: con quién habla, sus amistades, los lugares que visita, etc. En realidad, trata a su víctima como si fuera un objeto de su posesión. La víctima, en su ceguera, puede interpretar este comportamiento como "amor", pero en realidad se trata de abuso emocional. Paralelamente, el narcisista jugará con los sentimientos de su pareja, triangulando con terceros y provocando toda clase de reacciones emocionales negativas: ansiedad, sentimientos de inferioridad, celos. De esa manera, destruye su autoestima, y se hace con el control de la relación. Tanto en un caso, como en otro, se trata de abuso, y es importante que aprendamos a reconocerlo. 


La creencia de que el amor puede cambiar a las personas está muy arraigada. Normalmente, funciona, especialmente si existe reciprocidad y deseos de cambio. Sin embargo, con un narcisista sucede que el amor de su víctima favorece su agenda perversa de abuso y manipulación. El narcisista está feliz de ser narcisista, no quiere cambiar, el amor ingenuo de su presa es interpretado por él como un signo de inferioridad, lo que alimenta sus ansias de control y de dominio. 

Amar al narcisista es una trampa, ellos ni pueden amar ni quieren hacerlo, ello equivaldría a renunciar a su narcisismo perverso. Hay víctimas que racionalizan los efectos del vínculo traumático y permanecen al lado del abusador con la excusa de un "amor" patológico que las mantiene atrapadas en una relación abusiva. 


La idea de que "los polos opuestos se atraen" es un mito que se usa con frecuencia para justificar relaciones asimétricas e incluso francamente tóxicas. Lo cierto es que debe existir un cierto grado de afinidad y/o complementaridad entre las personas para que conecten entre sí. El narcisista conoce por experiencia esta verdad, por eso cuando seduce a su víctima crea el espejismo de una falsa compatibilidad, así logra que la otra persona baje sus defensas psicológicas, y piense que ha encontrado su pareja ideal

La persona se enamora de alguien que se parece a ella misma, un ser construido con sus propios rasgos. Se trata, en realidad, de una estafa, cuando la máscara se cae y la víctima descubre el ser calculador y perverso que se esconde detrás, se da cuenta que no tiene compatibilidad real con el abusador. Aceptar que se ha estado enamorado de un personaje que no existe es clave para superar la disonancia cognitiva


Un amor entre adultos no puede, ni debe, ser incondicional. Algunas víctimas son condicionadas a amar al narcisista a pesar de todo el arsenal de maltrato que padecen. El lavado de cerebro llega a veces hasta el punto de sentirse dispuestas a soportar situaciones verdaderamente denigrantes, en nombre de un falso amor ¡Despertemos!, amar incondicionalmente a otro adulto no sólo es tóxico e irreal, sino que puede ser peligroso. El amor, incluso el más sincero e intenso, se puede destruir si nos tratan mal, y, honestamente, es correcto que sea así. 

Si crees que el amor al narcisista debe ser incondicional: ¿Qué pasa si te golpea? ¿Qué pasa si te dispara o te apuñala? ¿Qué pasa si lastima a tu hijo? ¿Qué pasa si te engaña una y otra vez? ¿Qué pasa si te humilla o te difama? ¿Qué pasa si, abusivamente, te manipula, devalúa o descarta? ¿Aún lo amarías en alguno de estos casos? Seguir amando a una persona en estas circunstancias es altamente tóxico y peligroso. En realidad eso no es amor, sino el fruto envenenado de una relación abusiva que engendra en ti un vínculo traumático. 

Un adulto sano emocionalmente no puede ofrecer un amor incondicional a otro adulto. El amor tiene ciertos límites y condiciones, si tú los traspasas, en defensa de mi propia integridad emocional y psicológica tengo que decirte un NO rotundo, y salir inmediatamente de tu vida.


Este mito del amor, lamentablemente, está bastante extendido, y es el causante de muchos problemas en las relaciones de pareja. La pretensión de que los demás "deberían" saber lo que me sucede carece de fundamento. No, no tienen porqué saber lo que siento, o lo que pienso, y exigirles que lo presupongan o que lo adivinen es abusivo. Que nos amemos no significa que podamos comunicarnos por telepatía, el amor maduro conlleva que podamos hablar asertivamente de lo que pensamos y sentimos. 

El narcisista, en su pensamiento mágico, pretende que su pareja conozca sus necesidades y deseos sin él comunicarlos en forma expresa. Sus expectativas son irracionales. Además, nunca declara abiertamente a la víctima las razones de su conducta manipuladora, la somete al juego de tener que "adivinar" lo que le sucede, lo que genera ansiedad e incertidumbre en la persona que lo sufre. Se trata, está claro, de una táctica de poder y de control. Con el tiempo, nos percatamos que el abusador es incapaz de comunicarse en forma asertiva, entre otras causas, porque no percibe al otro como un "tú" diferenciado, y no hay reciprocidad en la relación. Si alguien pretende manipularnos con el juego de la "adivinanza", no caigamos en la trampa: la única forma de saber lo que le pasa al otro es que lo diga directamente, y no hay más.


El abuso y el maltrato no tienen justificativo de ningún tipo, y mucho menos pueden excusarse en nombre del "amor". Esta distorsión responde a modelos de relaciones interpersonales contrarios a la dignidad humana. Las personas, por supuesto, pueden tener diferencias y conflictos, pero la forma de resolverlos no es nunca el maltrato ni el comportamiento abusivo. Una persona que nos ama no procura hacernos daño, ni nos agrede, física o emocionalmente, ni nos humilla o abandona, esto parece de sentido común, pero en la "lógica" del narcisista todos esos comportamientos pueden tener cabida, dado que para él las relaciones humanas son un asunto de control y de dominio. Además, él se cree con derecho a "castigar" a su víctima cuando su comportamiento amenaza su régimen de poder. Para justificar sus acciones intentará hacer gaslighting: "Has hecho que me enfadara", "he actuado así por tu bien", "si no te quisiera, no te lo diría", etc. Todas estas frases son un disfraz, patrañas para negar lo que sucede: que una persona con la que mantengo un vínculo me maltrata o abusa. No caigamos en sus juegos malignos, el abuso es el abuso, y no tiene justificación de ninguna clase.


El centro de gravedad de tu vida no lo puede ocupar otro ser humano, eso te convertiría en un ser dependiente de él. Las personas caminamos juntas, compartimos, nos necesitamos, pero no vivimos los unos para los otros, eso es una distorsión del verdadero amor. El narcisista busca deliberadamente que dependas de él, no hay nada que lo empodere más que decirle: "no puedo vivir sin ti", cuando lo logra, sabe que se ha hecho con el control y que te domina. Ese tipo de vínculo es destructivo y termina lesionando seriamente tu autoestima. Ademas, no hay reciprocidad, él es incapaz de establecer lazos emocionales genuinos contigo, y esa es, precisamente, la trampa maligna. El Contacto 0 es la solución de este callejón sin salida, para el depredador es como una bofetada, es como decirle "mira, puedo vivir perfectamente sin ti y ser feliz". 

© LibresDelNarcisista

Comentarios

  1. Gracias Libres, siempre tan bien explicado

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  2. Libres mientras más te leo más entiendo lo que he vivido!! Gracias por recordarnos el abuso y gracias por estar ahí y recordarnos que no podemos bajar la guardia.😎
    Un abrazo y feliz de semana a tod@s🤗

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  3. Ufff es increible todo lo que usan para manipularnos pero lo que mas me impacto fue el hecho de los celos la N era exageradamente celosa y eso se lo hacia saber y jamas lo entendio y exactamente asi me trataba con un objeto me mandaba whats o me marcaba y se ponia la excusa que se preocupaba por mi ya q no le contestaba al momento o no le respndia los whats

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  4. Hola, yo he tenido una relación de "amistad" con un narcisista pero he vivido la obsesión que tenia por encontrar pareja. Desde que lo conocí era su máxima preocupación, su vida era un caos, vivía en la amargura más absoluta, intentaba conquistar a diestro y siniestro, sin filtro, solo quería una pareja para sentirse "feliz". Idealizaba el amor no lo vivía de forma natural y sana, para él era algo obsesivo. Estaba convencido de que todos sus problemas, miedos, inseguridades y carencias desaparecerian teniendo pareja. Sigue el mismo patrón de conquista, buscaba chicas que estuviesen pasando algún trance emocional, les bombardeaba a mensajes, les prometía muchísimas cosas y todo esto a un ritmo frenético, todo tenía que ser ya, era muy impaciente. Me consta que ha conocido a una chica de otro país, lo ha dejado todo y se ha marchado a vivir con ella todo esto en cuestión de pocos meses, en casos normales o sanos también puede darse que tomes una decisión precipitada y todo salga bien pero en su caso estoy seguro que lo ha forzado todo y su nueva presa estará viviendo en las nubes víctima de un lovebombing de lo más abusivo. A mi esta distancia física me favorece en mi recuperación, ojalá tarde mucho en volver pero me temo que volverá tarde o temprano sólo de su nueva aventura... Un saludo

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  5. Buenas noches, llevo 12 a#os al lado de un narcisista, nunca pense q el fuera esto, he intentado atentar contra mí vida, vivo ansiosa y pienso en el todo el dia, ya no se que, hacer, no logro alejarme de el.

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